La modificación normativa -Directiva (UE) 2017/2398 ) -    armoniza las condiciones mínimas de protección a la salud en relación, entre otras sustancias, al polvo respirable de  S ílice Cristalina y su consideración como agente cancerígeno y el ordenamiento español tiene la obligación adaptarse A ella.

La Directiva considera un agente cancerígeno el polvo respirable de Sílice Cristalina. Este polvo causa cáncer de pulmón y otras enfermedades pulmonares crónicas como silicosis, enfisema o tuberculosis.

Hasta la entrada en vigor de esta nueva regulación, la emisión permitida en el Estado español era de un 0,05%. El cambio normativo permite la aspiración de este mineral hasta un 0,1%.

La subida puede parecer mínima. Sin embargo, no debemos ceder a la confusión, ya que al tratarse de partículas que al ser inhaladas, pueden ocasionar cáncer, elevan el riesgo laboral en profesiones que tienen una mayor exposición a partículas pequeñas de sílice que se encuentran en el aire, principalmente en el polvo de cuarzo, en entornos industriales y ocupacionales.

Los materiales o productos que contienen sílice representan un peligro en la medida que ésta alcance un tamaño de partícula de polvo respirable (partículas menores a 10 micrones), ya que al inhalarse, estas partículas pueden penetrar profundamente en los pulmones, siendo en ocasiones imperceptibles a simple vista.

La exposición laboral se asocia a trabajos que alteran la corteza terrestre, faenas que requieren movimiento de tierra/arena, fracturación de rocas, trabajadores que usan sierras de mano para cortar materiales como hormigón y ladrillo, así como en actividades realizadas principalmente en los sectores de la Industria Manufacturera (del vidrio, de la cerámica, en la fabricación de ladrillos refractarios, entre otras) y de la construcción.

En este sentido, suponen un riesgo las actividades abrasivas que cortan, troquelan, taladran o trituran pueden hacer que se forme polvo de sílice. También, en la eliminación de pintura, aceites, óxido o polvo de una superficie, mezcla de hormigón, taladrado o corte, perforación de rocas, aserrado, perforación neumática y chorreado abrasivo para superficies lisas como vidrio o piedra.

Mayor riesgo de contraer silicosis

Por tanto, en el mundo existen millones de trabajadores en riesgo de contraer silicosis debido a que el dióxido de silicio es el componente predominante de la corteza terrestre. Se trata de una antigua patología ocupacional producida por la exposición a la Sílice. La silicosis es una fibrosis pulmonar con formación de nódulos en el tejido pulmonar alrededor de los vasos sanguíneos en la zona de los bronquíolos respiratorios.

Es una enfermedad crónica, incurable e irreversible, potencialmente mortal que altera la capacidad respiratoria del trabajador. No tiene cura. Dado que afecta el funcionamiento de los pulmones, el individuo es más susceptible de contraer infecciones pulmonares como la tuberculosis.

Productos sustitutivos de la Sílice Cristalina

La Sílice es uno de los elementos más comunes de origen natural del planeta. La Sílice Cristalina es el nombre científico de un grupo de minerales que contiene silicio y oxígeno. Cristalina hace referencia a que los átomos de oxígeno y de silicio están dispuestos en un patrón específico. Tiene varias formas, las cuales incluyen el cuarzo, la cristobalita y la tridimita.

Está presente en el mineral de cuarzo y en todos los productos artificiales en los que se ha empleado arena de sílice para su fabricación (hormigones, morteros, ladrillos no cocidos, …).

Su componente mineral es el dióxido de silicio (SiO2) y se encuentra en dos formas: cristalina o no cristalina (también conocida como amorfa). La arena y el cuarzo son ejemplos comunes de sílice cristalina.

Los materiales que contienen sílice cristalina no son peligrosos, a menos que sufran alguna alteración y generen partículas pequeñas que puedan penetrar en los pulmones (“sílice cristalina respirable”). Pero es ésta generación de partículas pequeñas que se produce en el proceso de chorreado, lo que hace la sílice cristalina respirable cuando se utiliza como abrasivo.

Al considerarse las partículas respirables de arena de sílice (sílice cristalina" cancerígenas, su utilización como agente abrasivo mediante chorreo y/o proyección a alta velocidad, exige unas medidas de prevención e higiene de la salud de los trabajadores y el entorno extremadamente costosas y de alto riesgo. Por dicho motivo se recomienda utilizar otros abrasivos minerales que no contengan sílice cristalina como por ejemplo: arena de olivino link, arena de garnet, vidrio triturado, carbonato cálcico, silicatos de aluminio, calcio, etc. Estos abrasivos, permiten un resultado igual o mejor que la arena de sílice, pero sin riesgo para los trabajadores.

Usos de la Sílice Cristalina

La arena de olivino , no tiene sílice cristalina, por lo que no supone riesgos cuando se emplea como abrasivo. La sílice presente en la arena de olivino está en forma de sílice amorfa, combinada con otros metales, lo que hace que su empleo como abrasivo, no suponga riesgos a la salud.

El vidrio comercial y por consiguiente su triturado o granulado empleado como abrasivo está constituido por sílice amorfa (no cancerígena) que es el resultado de la combinación de moléculas de sílice con óxidos como CaO, Na 2O, K 2O y Al 2O 3. Esto mismo ocurre con los sílicatos de aluminio y calcio utilizados como abrasivos .