Por su papel cada vez más importante en actividades como la eólica, hidráulica y geotérmica, y su mayor presencia en los paneles de plantas fotovoltaicas, el acero se ha revelado como un material fundamental en la transición hacia una economía global menos dependiente del carbono y, por lo tanto, menos contaminante en la producción de energías renovables.
Y gracias a que es reciclable en su totalidad, tanto su producción como sus diversas aplicaciones resultan inofensivas para el medioambiente y muy compatibles con proyectos de energía renovable.
La industria del acero, clave en la construcción de paneles solares
Los paneles o módulos fotovoltaicos (placas fotovoltaicas) —llamados exclusivamente paneles solares, o placas solares, aunque estas denominaciones abarcan además de otros dispositivos— están formados por un conjunto de células fotovoltaicas que producen electricidad a partir de la luz que incide sobre ellos mediante el efecto fotoeléctrico . Con la luz captada por las celdas solares, se produce un campo eléctrico que libera una corriente.
La energía solar es una de las respuestas a la sostenibilidad al convertir luz en calor o electricidad por medio de paneles solares. De esta forma, con la aplicación de un panel solar y el uso de baterías basadas en iones de litio o sodio-nion , sería posible reducir hasta en un 70% el gasto energético de los hogares.
La industria del acero es clave en la instalación de paneles foltovoltaicos porque las estructuras metálicas de soporte se elaboran a partir del acero, generando muchos beneficios.
De hecho, los proyectos diseñados para los servicios públicos figuran entre los principales clientes de la industria siderúrgica, ya que las centrales eléctricas llegan a producir entre 100 y 1000 MW de energía, para lo cual se requieren entre 35 y 45 toneladas de acero .
Alto nivel de resistencia, Maleabilidad y elasticidad del acero
Los sistemas fotovoltaicos permanecen la mayor parte del tiempo a la intemperie, expuestos a condiciones climáticas como viento, lluvia y nieve, por lo que es indispensable contar con un recubrimiento que soporte la corrosión a lo largo de los años. Necesitan, por tanto, un material como el acero , que pueda ser moldeado para la construcción de perfiles con distintas especificaciones.
Otra de las razones por las que la industria siderúrgica acompaña los esfuerzos por la sostenibilidad es que una vez instaladas, las estructuras de acero no necesitan mantenimiento, con lo que se evitan procesos de limpieza y reparación potencialmente contaminantes.
Y algo muy importante: los residuos de la fabricación del acero se emplean para producir otros productos.