Según cálculos de Bank of America, la extracción de cobre, el "nuevo petróleo", en la franja pirítica ibérica podría generar en el futuro unos beneficios brutos operativos (ebitda) de casi 16.000 millones de euros.
La franja pirítica ibérica es la zona que va desde el sur de Portugal hasta las provincias españolas de Huelva y Sevilla. El ebitda es un indicador financiero (acrónimo de los términos en inglés Earnings Before Interest Taxes Depreciation and Amortization) que muestra el beneficio de cada empresa antes de restar los intereses que tienes que pagar por la deuda contraída, los impuestos propios del negocio, las depreciaciones por deterioro …
Y el cobre goza de la denominación del "nuevo petróleo" por su valor como materia prima clave en el desarrollo de la transición energética, ya que es utilizado en baterías eléctricas e instalaciones renovables.
Para llegar a los 16 mil millones de euros citados por Bank of America, los analistas de la firma de Wall Street estiman que los grupos mineros podrían producir 7,5 millones de toneladas de metal en la zona, a un precio medio a largo plazo de unos 7.000 dólares por tonelada.
España cuenta en total con 2.629 operaciones mineras, que emplean cerca de 30.000 personas, que en 2020 produjeron materias primas por unos 3.000 millones de euros. Sobre esta cantidad, un 40% corresponde a la actividad en Andalucía.
Bank of America prevé que Sandfire Resources, Atalaya, First Quantum y Lundin sumen una producción de 160.000 toneladas de cobre en 2023 en sus instalaciones del sur de la Península Ibérica, unos ingresos de 1.280 millones. Por ello, Bank of America prevé una ola de fusiones en la industria.
Carrera empresarial para hacerse con el cobre español
La mencionada producción de cobre generaría 52.600 millones de dólares en ingresos, con un margen de ebitda del 30%. Para aprovechar estos recursos, existe una carrera empresarial de empresas e inversores internacionales tomando posiciones en los yacimientos españoles.
La última gran operación ha sido la adquisición de Minas de Aguas Teñidas (Matsa) por la compañía australiana Sandfire Resources, valorada en unos 1.600 millones de euros. Otras firmas con presencia destacada en la región son la canadiense Lundin Mining, que opera el depósito portugués de Neves Corvo; Atalaya Mining, firma participada por el gigante suizo Trafigura y dueña de la histórica mina onubense de Riotinto; First Quantum, concesionaria de Carrera empresarial para dominar las minas españolas de cobre Las Cruces en Sevilla; Grupo México, que quiere reabrir la explotación de Aznalcóllar; Ascendant Resources, que acaba de hacerse con el control de la cantera lusa de Lagoa Salgada; y PanGlobal Resources, con un proyecto de 5.500 hectáreas en Escacena (Sevilla).